Recibimos a representantes de Misereor
Bert y Liz, representantes Misereor, conocieron el trabajo en defensa del territorio, en construcción de ecotecnias, en agroecología, en transformación de alimentos y otros productos y en comercio comunitario que desarrollan hombres y mujeres campesinas de la Cuenca de la Independencia.
En defensa del territorio, conocieron los proyectos de diseño y construcción de la Unidad de Producción Familiar, que incluye tres espacios de la vivienda campesina sustentable:
el traspatio, donde se encuentran las ecotecnias como la cisterna de captación de agua de lluvia, el sanitario ecológico seco, el filtro de aguas grises, el fogón ahorrador de leña, las camas de hortalizas para consumo familiar, la farmacia viva, los frutales y los animales de traspatio;
la parcela, donde se siembra la milpa: maíz, frijol y calabaza, otros cultivos de temporal y se produce forraje para el ganado;
y el monte, donde se colocan los apiarios y se consigue leña a través de una poda consciente.
Esta integralidad conforma la vida campesina sustentable que buscamos rescatar en nuestro territorio, una región amenazada por la avanzada de la agroindustria transnacional de exportación que tiene el apoyo de las autoridades.
Nuestros visitantes conocieron algunas comunidades de la Cuenca, donde fueron recibidos con el calor que caracteriza a la gente de nuestro territorio, conocieron los proyectos productivos y de transformación que son impulsados por las mujeres organizadas de las comunidades.
La amenaza de la desertificación de la Cuenca
Quedaron impresionados por la devastación del territorio a causa de la sobreexplotación del acuífero, la avanzada de la agroindustria de exportación y la amenaza latente de la instalación de una mina cielo abierto por la empresa canadiense Argonaut Gold.
La problemática de nuestra región ha sido ampliamente denunciada por el Centro de Desarrollo Agropecuario (CEDESA), la Coalición en Defensa de la Cuenca de la Independencia (CODECIN), y las organizaciones de base.
Pero los proyectos extractivos tienen el respaldo las autoridades estatales y municipales.
Por ello, los visitantes aseguraron que el trabajo que hoy hace CEDESA, junto con las organizaciones de base y de las familias en las comunidades campesinas para defender el territorio, es más necesario que nunca.
En conjunto, CEDESA y Misereor seguiremos trabajando de la mano para defender la Cuenca de la Independencia, ante el avance de estos proyectos extractivos que amenazan nuestra vida campesina.
